LAUDEM GLORIAE (7 DE 19)

A partir de esta fecha apenas si encontramos una carta o escrito de Isabel donde no se cita o se expliquen a tiempo y a destiempo Efesios 1,4-6 y Rom 8,29-30. Vive como deslumbrada por el misterio, embebida en su embeleso. Vive dentro de sí misma en el más hondo abismo el misterio del amor que la hace Laudem gloriae . Este nombre, de hecho, lo tomó de San pablo en su carta a los efesios 1,6,12 donde dice que Dios nos ha elegido en Cristo para ser alabanza de gloria de su gracia (V 6), para alabanza de su gloria (V12). Escribe al abate Andrés Chevignard: “Ayúdeme señor abate. Tengo mucha necesidad. Cuanto mayor es la luz más siento mi impotencia. ¿Quiere usted (ya que es gran pontífice) consagrarme el 8 de diciembre al poder de su amor para que sea de verdad alabanza de gloria? (Laudem gloriae) (Ef 1,6.12). He leído esto en San Pablo y he comprendido que esta era mi vocación desde el destierro, esperando el Sanctus eterno” (Carta 250, hacía 29.11.1905, p. 784) Isabel es una conoce...