A) El desierto lugar de prueba. (2)
En el N.T. tenemos el caso de San José, el hombre justo e íntegro, el más santo:
- la prueba de encontrar a su esposa
en cinta…
- la prueba de la huida a Egipto…
- La prueba de la pérdida del Niño en
el templo.
Una prueba de Dios que presenta una
característica de amor y misericordia por parte del Señor. Si el pueblo sucumbe
a la prueba Dios siempre perdona y olvida, obra con misericordia. Es la visión
del salmista del salmo 78… ¿Cómo actuará el Señor? ¿destruirá a su pueblo? No.
Por el contrario, da órdenes a las nubes para que lluevan maná para comer,
enviándoles desde lo alto pan de ángeles, facturando desde el cielo provisiones
en abundancia, aves en número incalculable que caen alrededor de las tiendas.
A pesar de todo volvieron a pecar sin
tener fe en las maravillas que Dios ha ejecutado (Sal 78, 14-32) pero él se
compadecía, perdonaba sus culpas y no los destruía (v 38), el Señor miró su
angustia y oyó sus gritos, recordó su alianza con ellos y se arrepintió de su
cólera por su gran amor (Sal 106,45)
Es esta misericordia y amor de Dios
Padre una de las notas características de Cuaresma. La gratitud de Dios en todo
que es el tema fundamental de la carta para la Cuaresma del 2002 del Papa, “este
estupendo misterio de amor”, “todo nos ha sido dado por amorosa iniciativa
divina”
Ante esta actitud de Dios, San Juan
de la Cruz, uno de los santos más probados por Dios, ve las pruebas de Dios
como expresión de amor y como paga de una vida santa (Sant 1,12)
A Tobías le dice el ángel San Rafael
que porque había sido acepto a Dios le había hecho aquella merced de enviarle
la tentación que le probase para engrandecerle más (Tob 12,13) ¿una merced
enviarle una tentación, una prueba?
Y a Job, una vez que Dios aceptó sus
obras delante de los espíritus buenos y malos, luego le hizo merced de enviarle
aquellos duros trabajos para engrandecerle después de mucho más, como lo hizo
multiplicándole los bienes en lo espiritual y en lo temporal (Job 12 y 31,12)
Pues bien, de la misma manera lo hace
Dios con quienes quiere aventajarles según la ventaja principal, que los hace y
deja tentar para levantarlos todo lo que puede ser, que es llegar a la unión
con la sabiduría divina (Ll 2,38-29)
No he dicho nada de la penitencia
voluntaria. Tiene su valor… Pero lo que vale de verdad es la abnegación
interior… hacer en todo la voluntad del Padre del cielo.
P. Román Llamas, ocd
Próximas publicaciones
B) El desierto lugar de la revelación y donación de Dios.
Jesucristo y el desierto.
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